- 25 marzo, 2015
- By Administrador
- In Aceite Lubricante
- Tags Aceite, Amortiguadores, Lubricante, Motor, Suspension
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El aceite del motor es clave en el mantenimiento para que los motores sean eficientes. Su función principal es lubricar sus componentes mecánicos, para reducir la fricción y evitar la corrosión. También contribuye a su refrigeración, mediante la transferencia de calor desde las superficies más calientes a las más frías.
Una gestión incorrecta del nivel de aceite puede llevar al gripado del motor y causar daños importantes. Debe realizar controles periódicos del aceite, en general es necesario sustituir el aceite y su respectivo filtro de acuerdo con los intervalos de tiempo o kilometraje indicados en la tabla de mantenimiento específica de cada vehículo. Además será urgente revisarlo en los siguientes casos: Humo proveniente del tubo de escape y si es azul, debe actuar de inmediato, ya que probablemente el daño en el motor ya sea considerable. Pérdida de aceite, ya que indica daños en el cárter.
Para elegir el tipo correcto de aceite para su coche debe comunicarse con especialistas, ya que a menudo no es suficiente añadir aceite para garantizar el máximo rendimiento del motor, por ejemplo: Si usa el coche sobre todo en la ciudad, se debe utilizar un aceite semi-sintético, que puede proteger su motor de salidas frecuentes, cambios de velocidad y frenado continuo que someten a las piezas mecánicas del motor a un elevado estrés. Si usa el coche principalmente en carretera, es posible utilizar un aceite mineral, capaz de asegurar una mayor lubricación del motor llevado a sostener un mayor rendimiento.
En la elección del aceite también incide la temperatura exterior, a menudo es necesario cambiar el aceite durante el cambio de temporada, ya que la climatización del motor es particularmente importante, al igual que el índice de viscosidad del aceite con motor frío o caliente.
Además del aceite del motor, también es importante comprobar el nivel de aceite de las suspensiones, ya que permite absorber los impactos. El cilindro interior de los amortiguadores siempre debe estar bien engrasado y, por tanto, su control es esencial para la seguridad de la conducción.